Los MOOCs se están poniendo de moda con programas de educación, capacitación y práctica a distancia. El elearning busca crear nuevas experiencias de aprendizaje haciendo uso de las múltiples herramientas que existen en la actualidad. Pero, ¿estamos preparados para tomar estos cursos en línea? ¿tenemos las aptitudes necesarias para hacerlo?
Es fascinante tener a nuestra disposición tantas opciones de aprendizaje muchas de ellas gratuitas y en corto tiempo. Sin embargo, esto no quiere decir que todos terminemos con éxito el proceso que iniciamos emprender. Estamos ante una propuesta educativa que requiere que modifiquemos nuestro hábitos para culminar con éxito el proceso.
La educación en línea ha madurado
La educación en línea no es novedad, hace años que se viene practicando y hay varias herramientas para desarrollarla. Lo que sucede es que ahora está tomando mayor impulso a través de diversidad de propuestas en inglés y español. El mercado ha madurado, vemos a más empresas y universidades reconocidas en el mundo incursionar con sus propuestas en línea.
Tips para ser un estudiante exitoso
Estos son algunos que compartió Katie Lepi en su artículo “5 Tips From Successful Online Students” y algunos más.
Usar la tecnología adecuada: te parecerá básico pero verifica tu conexión y el equipo con el que cuentas para saber que tienes todo lo necesario para el curso. Por ejemplo, hay quienes necesitan ver vídeos y resulta que no tienen audífonos a su disposición.
Lee y comprende las instrucciones: sí, suena sencillo ¿no? pero un gran porcentaje de personas no lo hacen, es por ello que el proceso y los resultados se complican. Con esto claro, todo será más sencillo de desarrollar.
Ambiente agradable: necesitas estudiar en un ambiente en donde logres concentrarte en lo que estás haciendo. Las bibliotecas siempre son una interesante opción.
Verifica qué tipo de estudiante eres: todos aprendemos de maneras diferentes.
Aprende a ser disciplinado: sin duda uno de los pilares para que tu aprendizaje en línea sea un éxito. Define un horario, organiza tu calendario y cumple tus propias reglas.
Practica el trabajar solo: a muchas personas les cuesta trabajar solas, tener iniciativa y dejan todo a última hora. Por ello, no esperes a que alguien te diga cómo hacer las cosas y procura motivarte a tí mismo.
Optimiza tu tiempo y recursos: tenemos muchas herramientas a nuestra disposición para el proceso de aprendizaje. Procura revisar qué recursos pueden ser de utilidad para optimizar tu tiempo de lectura, vídeos o tareas.
Elimina las distracciones: nadie te dirá nada por estar en redes sociales, correo o chat en tu tiempo de aprendizaje. Pero, también debes aprender a eliminar todas esas distracciones que no te permiten avanzar. Evalúa y corrige.
Toma pausas para descansar: la vista y el cuerpo pueden cansarse luego de pasar varias horas frente a la computadora. Procura tomar pequeñas pausas durante el tiempo dedicado al aprendizaje.
Toma la iniciativa y brinda un poco más: la motivación no sólo debe ser inspirada por nuestro profesor/tutor o nuestros compañeros en línea. También, debe ser parte de tu propia iniciativa de aprender y compartir.
El contacto humano no desaparece con la tecnología, sólo es cuestión de aprender a comunicar. El aprendizaje en línea es un desafío para quienes no están acostumbrados a cumplir metas. En ocasiones el proceso puede ser frustrante y es fácil echar la culpa del fracaso a la cantidad de lecturas, falta de instrucciones o respuesta inmediata.